El contenido largo sigue ganando peso en la era digital, a pesar de la IA y los microcontenidos

La lectura de que el contenido largo ha quedado obsoleto en la era digital, dominada por resúmenes instantáneos y fragmentados, ha sido ampliamente exagerada. En un entorno saturado de contenido fugaz, desde las publicaciones en redes sociales hasta los resúmenes generados por inteligencia artificial (IA), la demanda por contenido largo sigue viva. De hecho, los usuarios no solo siguen leyendo, sino que buscan activamente artículos profundos, bien fundamentados y con sustancia, según apunta un artículo de Admonsters.

El cambio hacia contenido largos no es simplemente un fenómeno nostálgico, sino un reflejo de un comportamiento consciente y dirigido. A medida que las herramientas de Search y descubrimiento impulsadas por IA evolucionan, los usuarios tienen acceso a una mayor cantidad de información. Sin embargo, lo que realmente importa es la calidad del contenido con el que se encuentran y los ecosistemas en los que se consume. Los usuarios ya no están buscando información superficial; están inmersos en entornos que les ofrecen contexto fiable y profundo.

En este sentido, los expertos indican que los publishers siguen siendo fundamentales. Sin ellos, no existe la audiencia que los anunciantes necesitan alcanzar: son el entorno adecuado para que las marcas conecten con sus públicos. Los medios de comunicación tradicionales han evolucionado hacia un modelo digital, pero su función sigue siendo la misma: ofrecer contenido de calidad que respete la intención del lector y fomente el compromiso. La IA, aunque esencial para personalizar y optimizar la experiencia de búsqueda, no puede reemplazar el valor fundamental del contenido editorial creado por expertos.

La importancia de la intención de la audiencia

A pesar de la prevalencia de los microcontenidos y los resúmenes rápidos, la intención del usuario sigue siendo la clave. Las personas que hacen click en un artículo largo de 1.500 palabras desde una búsqueda asistida por IA no lo hacen por azar: buscan respuestas profundas y exhaustivas. Este comportamiento indica que los usuarios no solo están interesados en información, sino en obtenerla de manera completa y detallada. Esto marca un contraste fundamental con las búsquedas rápidas o las interacciones en redes sociales, donde el objetivo principal puede ser simplemente obtener un vistazo superficial de los temas.

La clave de este comportamiento radica en lo que se conoce como “browsing con propósito”. A medida que el comportamiento de búsqueda se vuelve más intencional, las marcas se están dando cuenta de que lo que realmente cuenta no es solo el número de clicks, sino el nivel de compromiso generado por ese click. El engagement se ha convertido en el verdadero indicador de valor. Es un cambio significativo en la manera en que los medios y los anunciantes miden el éxito de las campañas. El enfoque ahora se dirige a métricas como la profundidad del scroll, el tiempo en la página y las tasas de rebote, elementos que indican si una audiencia realmente está comprometida con el contenido.

El engagement como justificante y el papel de la IA

Para los media buyers, la era de las métricas tradicionales basadas únicamente en clicks está quedando atrás. Con el declive de la efectividad de la publicidad display tradicional y la resistencia creciente a los formatos MFAs, se están valorando indicadores más sólidos de compromiso. ¿Cuánto tiempo pasa un usuario leyendo un artículo? ¿Cuál es la profundidad de su interacción con el contenido? ¿Está dispuesto a pasar a una página siguiente o navegar más profundamente dentro de un sitio?

Estas métricas de engagement no solo son importantes para los publishers, sino también para las marcas y agencias que buscan justificar su gasto en medios. La transición de una publicidad invasiva a una publicidad más contextual y relevante es una respuesta directa a los nuevos hábitos de consumo. Las marcas deben adaptarse a este cambio, apostando por una publicidad que se integre de manera más natural dentro del contenido de calidad, brindando una experiencia más enriquecedora para el consumidor.

Aunque la IA no reemplaza a los publishers, marcas ni agencias, sí desempeña un papel clave como conector inteligente. Las agencias aportan la estrategia, los publishers proporcionan entornos de contenido premium y las marcas impulsan la creatividad. La IA actúa como puente entre estos actores, optimizando el uso de los datos disponibles, personalizando la experiencia y ayudando a los anunciantes a llegar a las audiencias correctas en el momento adecuado.

Esta colaboración tiene un papel destacado en el auge de CTV. Las plataformas de CTV están avanzando hacia una mayor contextualización del contenido, identificando no solo lo que aparece en pantalla, sino también lo que está ocurriendo en el entorno circundante. Esto permite que los anuncios se alineen mejor con el estado de ánimo, el momento y el mensaje, creando una experiencia más relevante para los usuarios. De hecho, este tipo de contextualización está comenzando a tener un impacto significativo en la efectividad de la publicidad, ya que se orienta hacia lo que los usuarios están viendo y cómo se sienten en ese momento.

La convergencia entre creatividad e IA

Uno de los desarrollos más interesantes en este espacio es la combinación de la creatividad humana con la inteligencia artificial. Los avances en IA generativa están permitiendo a las marcas crear variantes creativas bajo demanda, lo que les brinda una flexibilidad sin precedentes en la creación de contenido. Al mismo tiempo, la tecnología contextual se asegura de que esos activos se ubiquen en los entornos más relevantes para los usuarios.

La verdadera oportunidad en este momento no es elegir entre IA y creatividad humana, sino aprender a usarlas juntas para lograr resultados más efectivos. Cada jugador del ecosistema publicitario (publisher, marca, agencia y partner tecnológico) debe verse a sí mismo como parte de una misión común: crear un ecosistema de contenido más inteligente, más respetuoso con las audiencias y más capaz de conectar con ellas de manera significativa. A medida que todos estos actores trabajen de manera más cohesiva, veremos una evolución hacia un mercado publicitario más eficiente y enfocado en el compromiso real del consumidor.

A medida que avanzamos en la era digital, las personas siguen buscando contenido largo, detallado y profundo. Los anuncios y la publicidad deben adaptarse a este nuevo comportamiento del consumidor. Para tener éxito en esta nueva era, los anunciantes deben comprender que la calidad del compromiso es más valiosa que la cantidad de clics. La IA, al mejorar la personalización y facilitar la creación de contenido, está ayudando a conectar de manera más inteligente a los usuarios con el contenido que buscan. Los medios digitales y la publicidad, cuando se hacen bien, siguen siendo una forma poderosa de conectar a las marcas con sus audiencias, pero el éxito depende de crear experiencias más relevantes y valiosas para el consumidor.

Puntos clave:

  • A pesar del auge de los resúmenes y la IA generativa, los usuarios buscan artículos detallados y bien fundamentados, lo que resalta un comportamiento de búsqueda más intencional.

  • Las métricas de engagement como la profundidad de scroll, el tiempo en página y las tasas de rebote se están convirtiendo en los nuevos indicadores de valor para justificar la inversión publicitaria.

  • La convergencia de la creatividad humana con la IA está transformando la publicidad, permitiendo una personalización más eficaz y creando experiencias de contenido más relevantes para el consumidor.

Este resumen lo ha creado una herramienta de IA basándose en el texto del artículo, y ha sido chequeado por un editor de PROGRAMMATIC SPAIN.

 
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