Los medios tradicionales pierden terreno: redes y creadores dominan el consumo de noticias en 2025

El Digital News Report 2025, publicado por Reuters Institute for the Study of Journalism la pasada semana, confirma lo que muchos en el sector ya intuían: el ecosistema informativo mundial atraviesa una transformación estructural. La desconexión progresiva del público con los medios tradicionales, el ascenso meteórico de los creadores de contenido y la consolidación de plataformas sociales y de vídeo como principales canales de información marcan un antes y un después.

Según el informe, basado en una encuesta a casi 100.000 personas en 48 mercados que representan más de la mitad de la población mundial, el uso de redes sociales y plataformas como TikTok, YouTube e Instagram para informarse supera por primera vez al consumo de noticias en televisión, impresos y medios digitales tradicionales en muchos países. En Estados Unidos, el 54% ya accede a noticias principalmente vía redes sociales o plataformas de vídeo, superando al 50% que lo hace por TV y al 48% que visita webs de noticias. El cambio es especialmente agudo entre los jóvenes de 18 a 24 años, donde el 44% afirma usar redes como fuente principal de información.

El informe revela una fragmentación creciente del consumo informativo online: hoy existen seis plataformas que alcanzan al menos al 10% semanalmente con contenido noticioso, cuando hace una década solo lo hacían dos. Facebook (36%) y YouTube (30%) siguen siendo las más utilizadas, pero TikTok (16%) ya supera a X/Twitter (12%), y plataformas como Instagram (19%) y WhatsApp (19%) refuerzan su rol como canales informativos.

Influencers y creadores ganan fuerza

La irrupción de los influencers y creadores como fuentes de información es uno de los puntos clave del estudio. Sin embargo, esta transformación también plantea riesgos. Un 58% de los encuestados señala estar preocupado por su capacidad de distinguir información verdadera de la falsa online. Los influencers (47%) y los políticos nacionales (47%) son identificados como las principales fuentes de desinformación. En Nigeria y Kenia, el 59% y 58% respectivamente responsabilizan a los influencers, mientras que en EE. UU. y España son los políticos quienes generan más desconfianza (57%).

En paralelo, el informe analiza por primera vez el uso de inteligencia artificial como fuente de noticias. Aunque su uso semanal general es todavía bajo (7%), se dispara entre los menores de 25 años (15%). Las funcionalidades que generan más interés son los resúmenes automáticos (27%), la traducción de noticias (24%) y los sistemas de recomendación personalizada (21%). A pesar de ello, persisten reservas sobre la IA: se percibe que abarata y actualiza la producción de noticias, pero también que reduce la confianza, transparencia y exactitud.

Consumo de vídeo y audio

Otro de los ejes analizados es el consumo de vídeo. El 65% de los encuestados dice consumir noticias en vídeo en redes sociales y plataformas como TikTok y YouTube, frente al 52% en 2020. En países como Filipinas, India y Tailandia, la preferencia por ver las noticias supera a la de leerlas, mientras que en países nórdicos como Noruega o Alemania, la lectura sigue predominando. Sin embargo, incluso en esos mercados, los jóvenes prefieren cada vez más el vídeo.

El podcasting también gana peso, sobre todo entre las audiencias educadas y más jóvenes. En Estados Unidos, el 15% escucha al menos un podcast informativo a la semana, igualando a la radio (13%) y superando a la prensa escrita (14%). Los mercados nórdicos también destacan por su uso intensivo de podcast, mientras que en países como Japón o Italia este formato sigue siendo incipiente.

Respecto al modelo de negocio, el informe advierte de un estancamiento: solo el 18% de los usuarios en 20 países desarrollados paga por acceder a noticias online, una cifra que se mantiene estable. Noruega (42%) y Suecia (31%) lideran en suscripciones digitales, mientras que en países como Grecia, Serbia o Croacia, el porcentaje apenas supera el 6%.

Finalmente, el estudio subraya que, pese a la caída del consumo directo, las marcas de confianza siguen siendo las más utilizadas cuando los usuarios quieren verificar si una noticia es verdadera o falsa, seguidas por fuentes oficiales. Esta confianza residual podría ser una ventaja competitiva en un entorno saturado de desinformación y contenido automatizado.

“Aunque las audiencias valoran las marcas de confianza, simplemente ya no consumen las noticias como antes. El reto para los medios es adaptarse a una realidad donde el vídeo, la personalización y los nuevos formatos no son una opción, sino una necesidad para sobrevivir”, señala Nic Newman, autor principal del informe.

Puntos clave:

  • Las redes y plataformas superan a los medios tradicionales como vía principal de acceso a noticias, especialmente entre los jóvenes, consolidando un cambio estructural en los hábitos informativos globales.

  • Los creadores de contenido e influencers se posicionan como fuentes clave de información, pero también como focos de desinformación, generando nuevas tensiones sobre la confianza en el ecosistema.

  • El consumo de vídeo y podcast crece con fuerza, mientras la suscripción digital se estanca y la IA comienza a formar parte del consumo informativo, especialmente entre menores de 25 años.

Este resumen lo ha creado una herramienta de IA basándose en el texto del artículo, y ha sido chequeado por un editor de PROGRAMMATIC SPAIN.

 
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