ITV y Disney+ compartirán contenido en Reino Unido a partir del 16 de julio
ITV y Disney han formalizado un acuerdo que marca un nuevo hito en la relación entre plataformas de streaming y broadcasters tradicionales. A partir de este miércoles 16 de julio de 2025, ambas compañías comenzarán a compartir contenido seleccionado en Reino Unido: ITVX incorporará una sección rotativa de títulos de Disney+ y, a su vez, Disney+ ofrecerá una ventana destacada con contenidos emblemáticos de ITV.
La iniciativa, que recibe el nombre de “A Taste of…” en ambas plataformas, supone una fórmula inédita en el mercado británico: una colaboración que no implica la integración completa de catálogos, sino un intercambio estratégico y rotativo de programación. En el caso de ITVX, los usuarios podrán acceder a títulos de gran reconocimiento internacional como The Bear, Andor y Only Murders in the Building, mientras que Disney+ incluirá éxitos de ITV como Mr Bates vs The Post Office, Spy Among Friends y capítulos seleccionados de Love Island.
Un nuevo modelo de distribución
El acuerdo se alinea con una tendencia emergente en Europa: la colaboración entre plataformas SVOD y medios tradicionales para ampliar el alcance del contenido en un entorno cada vez más competitivo. En las últimas semanas, TF1 ha firmado un acuerdo similar con Netflix en Francia, y France Télévisions ha hecho lo propio con Prime Video. Sin embargo, el caso de ITV y Disney introduce una dinámica diferente, basada en la selección “curada” y en la actualización periódica, en lugar de una distribución masiva de todo el catálogo.
“El streaming ya no va solo de competir, sino también de colaborar de manera inteligente para ampliar audiencias y diversificar las propuestas de valor. Este acuerdo con Disney nos permite ofrecer más contenido de calidad a nuestros usuarios y demostrar el atractivo internacional de nuestras producciones”, explica Kevin Lygo, director general de Media & Entertainment en ITV a VideoWeek.
Estrategia de posicionamiento para ambas marcas
Para Disney, la alianza refuerza su posicionamiento como agregador global de contenido, abriendo una puerta de entrada a audiencias locales que aún prefieren plataformas de broadcasters tradicionales como ITVX. “Queremos que los espectadores británicos descubran el valor de Disney+ a través de las series y películas más premiadas de nuestro catálogo, al tiempo que facilitamos el descubrimiento de grandes contenidos británicos entre nuestros usuarios”, comenta Joe Earley, presidente de Direct-to-Consumer en Disney Entertainment.
Desde una perspectiva de negocio, el acuerdo tiene varias lecturas: ITV refuerza su estrategia de monetización en un entorno donde la visualización bajo demanda gana cada vez más peso frente a la televisión lineal, y Disney amplía la notoriedad de su catálogo en un mercado con saturación de plataformas y suscripciones. Además, la colaboración permite a ambas compañías generar sinergias sin los costes y fricciones asociados a licencias más amplias o integraciones técnicas profundas.
Un cambio de paradigma en Europa
El precedente británico podría inspirar a otros mercados europeos. Hasta ahora, muchos acuerdos de este tipo se habían limitado a situaciones puntuales o al mercado francés, donde los broadcasters mantienen una fuerza considerable. Sin embargo, el auge de las plataformas BVOD (broadcast video on demand) y el estancamiento en el crecimiento de suscriptores SVOD hacen que estas alianzas sean cada vez más atractivas en otros países, especialmente cuando se trata de ampliar la base de usuarios sin aumentar los costes de adquisición.
A largo plazo, se espera que este tipo de colaboraciones evolucionen hacia fórmulas más integradas de coproducción, licencias compartidas o incluso bundles que reúnan varias plataformas bajo una misma experiencia de usuario.
La colaboración entre ITV y Disney+ no solo amplía la oferta de contenidos para los espectadores británicos, sino que también inaugura una nueva era de estrategias cruzadas que combinan el reach local con el prestigio internacional. En una industria donde la atención del consumidor es el bien más escaso, acuerdos como este podrían redefinir las reglas del juego.
