Defensa y tecnología espacial: el nuevo boom inversor en startups estratégicas
La confluencia de avances tecnológicos, retos geopolíticos y la necesidad de fortalecer infraestructuras críticas está impulsando un nuevo ciclo de inversión en el ámbito de la defensa y la tecnología espacial. Startups que antes operaban sin apenas foco inversor ahora se sitúan en el centro del radar de fondos de capital riesgo, inversores institucionales y gobiernos que ven un enorme potencial para crecimiento, consolidación y transformación de modelo de negocio.
Capital fresco para startups estratégicas
El informe de KPMG “Emerging trends in aerospace and defense 2025” destaca que en Europa, por ejemplo, se han anunciado “planes masivos de inversión” para empresas de defensa, lo que está generando un entorno favorable para que startups con capacidad tecnológica se integren, crezcan o se transformen. Por su parte, en el sector espacial, la consultora Seraphim Capital revela que la inversión global alcanzó los 3.500 millones de dólares solamente en el tercer trimestre, como reflejo de un mercado que está acelerando con rapidez. Y en defensa tecnológica, los datos para los países de la OTAN registran más de 9.100 millones de dólares en financiación de venture capital en 2025, superando ya el total de 2024.
Sectores clave que apuntan alto
Varias áreas están atrayendo especial atención dentro de este nuevo contexto:
Sistemas autónomos, drones y sensores inteligentes como eje de la defensa del futuro.
Infraestructura espacial, con aplicaciones en comunicación segura, observación y posicionamiento global.
Tecnologías de uso dual, que nacen en el ámbito civil y encuentran aplicaciones críticas en defensa (y viceversa).
Diversificación geográfica, con Europa ganando terreno frente al dominio tradicional de Estados Unidos, y nuevas oportunidades de inversión y consolidación en juego.
Casos reales que ejemplifican la dinámica
Estas tendencias no se quedan en la teoría. Las inversiones están aterrizando en startups concretas que ya están reconfigurando el sector.
Epirus, una startup estadounidense especializada en sistemas anti‑dron, captó 250 millones de dólares en una ronda Serie D en marzo de 2025 para escalar su producción de la línea “Leonidas”.
Según un informe de 2025, las compañías europeas de tecnología de defensa recaudaron aproximadamente 1.500 millones de dólares en lo que va de año, lo que subraya el fuerte interés del capital en esta área.
En el sector espacial, la inversión global en el tercer trimestre alcanzó un récord de 3.500 millones de dólares, reflejando cómo nuevas startups de lanzamientos, satélites de órbita baja y servicios espaciales están entrando con fuerza.
En Europa, la operación de adquisición de Destinus al comprar la suiza Daedalean por 225 millones de dólares es uno de los mayores movimientos del año en “defence tech”.
Otro ejemplo: la startup europea Look Up (especializada en seguridad y vigilancia orbital) cerró en junio de 2025 una ronda de 50 millones de euros para desplegar su red global de radares de espacio y servicios de “Space‑Operations‑as‑a‑Service”.
Un momento de madurez y oportunidad
Este auge no es casual. Se está produciendo un cambio de ciclo en el que confluyen impulso presupuestario, demanda tecnológica y evolución del mercado. Los gobiernos están aumentando su inversión en capacidades estratégicas, mientras las startups tecnológicas están aprovechando su agilidad y especialización para ocupar espacios que antes monopolizaban los grandes contratistas. Además, muchas de estas compañías ya han superado su fase inicial: cuentan con tecnología probada, modelos de negocio validados y ambición internacional. Esto las convierte en candidatas naturales para integrarse en estructuras más grandes, consolidarse en nichos clave o liderar nuevas verticales del sector.
La transformación también llega al ámbito espacial, donde la innovación ya no se limita a la exploración o al uso institucional. Satélites de nueva generación, sensores avanzados y plataformas de análisis están dando lugar a modelos de negocio escalables con aplicaciones tanto civiles como militares. El espacio, literalmente, se está comercializando.
Oportunidad para emprendedores, inversores y compradores
Para los emprendedores, el momento actual representa una oportunidad estratégica para acceder a capital, escalar operaciones o explorar alianzas con grandes actores del sector. Para los inversores, es clave identificar startups que no ofrezcan solamente tecnología avanzada, sino que también encajen dentro de ecosistemas complejos y generen valor a largo plazo. Y para los compradores, este entorno es propicio para movimientos estratégicos que refuercen capacidades, aceleren innovación y aseguren posicionamiento en mercados clave. La clave ya no es únicamente detectar oportunidades, sino acompañar el proceso de integración, preservando el valor y potenciando la escalabilidad.
Hacia una fase de consolidación estratégica
Con startups más maduras, capital disponible y una necesidad urgente de capacidades tecnológicas, todo apunta a que entramos en una fase de consolidación intensa. Las operaciones de M&A no sólo crecerán en volumen, sino en sofisticación: la clave estará en identificar sinergias reales, complementar conocimientos y construir estructuras más sólidas.
Las empresas que sean capaces de pensar en términos de integración estratégica (más allá del cierre de la operación) serán las que lideren esta nueva etapa del sector.
Invertir con visión en sectores que definen el futuro
“El binomio defensa‑espacio se ha convertido en una de las fronteras de inversión más dinámicas del momento. Con capital entrando, tecnologías emergiendo y un mercado que exige renovación, los próximos años ofrecen oportunidades muy relevantes para quienes sepan leer el contexto, anticipar tendencias y acompañar el proceso de crecimiento e integración”, aseguran desde Pipeline Capital.
“El aprovechamiento estratégico de la tecnología, la escala internacional y la visión de negocio marcarán la diferencia entre participar y liderar el nuevo paradigma” manifiesta Carlos Gómez, Europe Partner de Pipeline Capital. Mientras la industria publicitaria debate cómo adaptarse a un mundo sin cookies, esta compañía nacida en Madrid en 2014 ya juega en otra liga: domina la inteligencia contextual, escala con IA propia y conquista mercados internacionales con una estrategia clara y audaz.
Su evolución no ha sido solamente cuantitativa. Tecnología construida in-house, una IA que entiende emociones humanas, alianzas con medios globales y marcas top-tier, adquisiciones estratégicas y resultados medibles en campañas reales. Todo orquestado desde una cultura de producto sólida y una visión ambiciosa que trasciende su origen como startup.
Esto es lo que hace de Seedtag una de las compañías más interesantes (y con más potencial) del panorama AdTech nacional y global.
De Madrid al mundo: una historia de crecimiento con propósito
En 2014, dos profesionales de una de las empresas punteras del mundo, Google, decidieron empezar de cero. Albert Nieto y Jorge Poyatos compartían una convicción: era posible hacer publicidad eficaz sin depender del rastreo de datos personales. Esa idea, que en su momento parecía contracorriente, dio origen a Seedtag. La empresa comenzó como muchas otras: desde una pequeña oficina en Madrid, con un equipo reducido, pocos recursos y una ambición clara. Con el paso de los años, y gracias a su enfoque en tecnología propia y talento interno, demostraron que su modelo no sólo era posible, sino escalable.
Ese crecimiento fue posible también gracias al respaldo inversor, que acompañó cada etapa del proyecto con rondas que permitieron escalar operaciones, contratar talento y expandirse internacionalmente. En sus primeros años, Seedtag cerró una ronda semilla de 400.000 euros en junio de 2014 y una ronda inicial de 1,5 millones de euros en octubre de 2016, liderada por Adara Ventures.
En 2017, levantaron una Serie A de 5,2 millones de dólares, que les permitió consolidar su tecnología y comenzar a trazar su plan de expansión internacional. La gran apuesta llegó en septiembre de 2021, con una Serie B de 40 millones de dólares, liderada por Oakley Capital, con participación de Adara Ventures y All Iron Ventures.
El gran salto se produjo en julio de 2022, cuando el fondo Advent International adquirió una participación mayoritaria en Seedtag por un importe superior a los 250 millones de euros, manteniéndose en el capital los inversores anteriores. Esta operación fue clave para acelerar su crecimiento y ejecutar su estrategia de adquisiciones, como las de KMTX o Beachfront.
Ese crecimiento les impulsó a expandirse internacionalmente. En 2022, adquirieron la startup francesa KMTX para reforzar sus capacidades en machine learning. En 2024, compraron la estadounidense Beachfront, especializada en CTV. Ambas operaciones consolidaron su presencia en Europa y facilitaron su entrada en el competitivo mercado estadounidense.
Hoy, Seedtag está presente en tres continentes, con oficinas en Madrid, Londres, París, Nueva York y São Paulo, y con Estados Unidos representando ya el 50% de los ingresos globales. Ese recorrido, de idea fundacional a expansión global, ha sido sostenido por una inversión constante en capacidades propias, especialmente tecnológicas.
Una tecnología que entiende el contexto y predice el impacto
El crecimiento de la compañía ha ido acompañado de una evolución constante en su propuesta de valor. En 2025, Seedtag dio un paso importante con el lanzamiento de AURA by Liz, una suite creativa que combina IA generativa, procesamiento del lenguaje natural y principios de neurociencia para anticipar el rendimiento de las campañas.
Liz, su motor de inteligencia artificial, es capaz de interpretar contenido, emociones e intenciones del usuario en tiempo real, mejorando la relevancia de los anuncios y su eficacia. Las marcas que han integrado esta tecnología en sus estrategias han obtenido mejoras significativas en KPIs como el reconocimiento de marca, la consideración y la intención de compra.
Este tipo de innovación consolida el enfoque de Seedtag: una compañía que no sólo adapta su tecnología al mercado, sino que contribuye a definir hacia dónde evoluciona la publicidad contextual.
Consolidación y estructura internacional
2025 también ha sido un año clave a nivel organizativo. La compañía ha registrado un crecimiento interanual de doble dígito y ha reforzado su estructura con la incorporación de 125 nuevos profesionales en EMEA, especialmente en áreas como Customer Success, Publisher Development y Operaciones. El nombramiento de Brian Gleason como nuevo CEO supuso un paso más en su profesionalización. Los fundadores asumieron nuevos roles: Jorge Poyatos como Chief Innovation Officer y Albert Nieto como Strategic Advisor, manteniendo el vínculo con el desarrollo de producto y la estrategia global.
Además, la llegada de líderes como Álvaro Sola o Anil Lamba ha marcado un cambio de etapa. Seedtag ya no se comporta como scaleup; se comporta como líder de mercado. En palabras de Borja Fernández, Country Manager en España: “Mientras la industria AdTech se enfrenta a la incertidumbre, en Seedtag estamos invirtiendo activamente en capacidades, ampliando equipos y ofreciendo más valor a los anunciantes”.
De proveedor a partner estratégico
Seedtag colabora con marcas como Nike, Meta, L’Oréal, Iberdrola, Repsol, Mango o Vueling, y mantiene acuerdos con medios como The Guardian en Reino Unido o El Confidencial, Atresmedia, Prisa, RBA y Vocento en España. Este ecosistema de alianzas refuerza su posición como socio estratégico para anunciantes y medios que buscan soluciones efectivas, personalizadas y alineadas con los nuevos estándares de privacidad.
Un modelo construido con coherencia
A lo largo de su trayectoria, Seedtag ha mantenido una línea coherente entre su visión fundacional y su crecimiento. Las adquisiciones, la evolución organizativa, el desarrollo de producto y la expansión geográfica responden a una estrategia de largo plazo, no a movimientos oportunistas. Seedtag representa lo que Pipeline Capital valora en el ecosistema tecnológico: visión a largo plazo, foco en el producto y una ejecución que genera impacto real. No es solamente una empresa destacada del sector: es un referente construido con coherencia. Por todo ello, es nuestra empresa del mes.
Contenido ofrecido por Pipeline Capital
